martes, 21 de junio de 2011

Del poemario PERRO MUERTO / Pablo Delgado U.

Colección "En breve"

CERCENANDO EL MAR EN SU CAÍDA


Sabía de esa calle
cercenando el mar en su caída.
Bajaba mis pisadas por la vera
y cruzaba la plaza en un desdén hasta tu cuarto.
Condell, Pudeto, el café,
eran mis señas para golpear las escaleras
donde hubo disturbios, malos entendidos
y destrozos de amor en esa turba.

Ya en ese entonces amaba
y bajía cual preñado mi frondosa saliva.
Mordía pañales y banderas para conquistarte
en fuese de gloria sobre las otras batallas.
De mí no se cuenta, sino, la brevedad
de ser parsimonioso, como el gusano que se atreve
al éxtasis en fuga de cruzar la selva
de frondosa vaguedad.

Ahí fue mi conquista.
Me atrevo a decir que mantuve la calma
para despistar mi inocencia.
Nada se sabe,
ni se ha descubierto pito alguno
para acusar mi adicción.

Sólo amaba cual petardo las tardes enteras
en tu cuarto de paredes oscuras.
Menuda fragancia aterrizó en mis labios
cuando ya sabía de esa calle
cercenando el mar en su caída.


Pablo Delgado U.

2 comentarios:

  1. un aplauso a Pablo, sus palabras tejen un poema valioso y certero en su mirada

    abrazo grande a ustedes por la divulgación que siempre es bienvenida

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  2. Gracias Elisa...se trabaja duro en eso, como sabes, y aunque quisiéramos hacer mucho más...faltan manos, no ganas.

    Saludos.

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